Hay demasiados problemas en diversos sectores en nuestro país.
Está pandemia aparte de asesinar, ha causado retraso y caos en nuestros países.
Es demasiado lo que viene sufriendo la población en nuestro país, Perú.
Si ya hemos tenido problemas de subdesarrollo, corrupción, saqueo, empobrecimiento, etc., las cosas se estarían agravando aún más.
Los distintos servicios que recibe la población estarían en situación de abandono y colapso, encima de ello la delincuencia se estaría enseñoreando.
Es el colmo lo que se habría descubierto en el hospital Almenara de EsSalud, que se habrían estado negociando camas UCI por encima de 80 mil soles y habrían 9 personas involucradas.
El sector educación habría descuidado su función durante casi dos años.
Hay millones de estudiantes que carecen de tecnología (computadoras, tablets, etc.) y hay ausencia de Internet en muchos pueblos.
Ésta pandemia entonces aparte del empobrecimiento ya existente, habría ocasionado muertes innecesarias y ahora millones de estudiantes que no habrían recibido educación adecuada durante casi dos años.
No hay trabajo, han cerrado o quebrado muchos negocios y empresas.
Existe un grave deterioro de la seguridad ciudadana, lo cual ocasiona caos y desesperanza.
Encima de ello en el sector electoral, se originó una serie de incertidumbres, que por ahora algo se habría aclarado, sin embargo hay una amenaza a la gobernabilidad para los meses que vienen y otros problemas en ciernes.
Se han recibido créditos o préstamos para salud, que no habrían sido utilizados ¿Dónde está ese dinero?
Y así podríamos continuar con el grave daño que se habría ocasionado en diversos sectores de la economía, gobierno, producción, salud, educación, etc., etc.
¿Qué nos espera?
¿Podrá el nuevo gobierno asumir este múltiple reto, de superar estás dificultades, sumadas a las heredadas de tiempos pasados que ya nos habrían ocasionado grave deterioro a nuestro país y a la ciudadanía en general?
Ciertamente esto, es algo que habría repercutido en todo el planeta y cada país podrá responder a estos retos conforme su potencial de reserva y capacidad de reacción.
Perú podría surgir a un nuevo estado de cosas si no existiera un sector de traidores y delincuentes enquistados en diversos sectores públicos y de gobierno.
Peor si tenemos en el ruedo político, un colectivo que se dedicaría a obstaculizar, a querer vacar, a sembrar desconfianza e incertidumbre, muestra de lo que ya hemos visto en años pasados.
Pero hay un tercer enemigo y es el existente en las entrañas de gobierno, una quinta columna que ya viene haciendo daño desde hace años y que ahora se incrustraría en los ámbitos gubernamentales y creará graves problemas, enemigos nuevos que aparecerán en los que se adicionaría con el nuevo grupo de gobierno.
Lamentablemente no se estaría considerando ésta peligrosa rémora, un lastre que ya existe, al que se sumaria los que vienen disfrazados como aliados de gobierno.
Qué pena esto tenga que suceder, pero es consecuencia de la existencia de la maldad y su obrar en este tiempo.
Hay posibles soluciones, ojalá lo tengan en cuenta y lo sepan descubrir.
Estaré atento y escribiré al respecto, solo me queda hacer eso, ya que no estoy en situación de aportar más directamente. Y la verdad no lo haría, no dejarían trabajar.
La maldad estaría enseñoreada...
Jorge Paredes Romero.
Humanista peruano.
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